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El aire comprimido es una instalación habitual en el sector industrial. Conviene tener presente los errores más comunes de estos equipos productores de aire comprimido, que en ocasiones son provocados por no disponer de un mantenimiento industrial acorde a las necesidades del equipo e industria.
Errores en el mantenimiento industrial de las instalaciones de aire comprimido.
La detección de fugas de aire comprimido es un trabajo que debe realizar un experto y con los equipos de ultrasonidos podemos detectar los fallos en la propia instalación de aire comprimido.
Si no se detectan en los mantenimientos preventivos, pueden llevar a que se realice un sobrecoste innecesario de energía en la fábrica que actúe en contra de la eficiencia energética deseada.
Algunos errores habituales en este tipo de maquinaria industrial son:
Espacio de la máquina de aire comprimido.
Conviene calcular bien el espacio necesario para la máquina de aire comprimido. Se debe disponer de un acceso sencillo para hacer las revisiones.
Ventilación correcta.
Los conductos de ventilación hacia el exterior aseguran la correcta circulación de aire de las máquinas. Es importante colocarlos con espacio suficiente. Esto evitará sobrecalentamientos y, en consecuencia, fallos en las maquinarias.
Regulación térmica.
Lo recomendable es que la temperatura de las máquinas estén siempre controladas. Lo más habitual es que la temperatura ambiente oscile entre 5 y 30 º C como máximo. Esta última temperatura solo en la sala de compresores dedicada a maquinaria.
Limpieza profesional.
Las limpiezas profundas deben ser realizadas por profesionales que conozcan cada tipo de máquina y la forma en la que fue instalado cada aparato.
Ambiente cuidado.
Tanto a la hora de realizar la instalación como de mantenerla, debe tenerse en cuenta el ambiente donde se ubica la máquina. Se evitarán gases contaminantes o humedad. Estas condiciones podría hacer que el aceite llegue a dañar los circuitos del compresor.
Presión controlada.
Las presiones entre 6 a 7 bar son las adecuadas para la red de este tipo de maquinaria. La medida exacta debe calcularse teniendo en cuenta la presión que se va a establecer para trabajar.
Caudales del aire comprimido.
El caudal de aire comprimido afecta a la demanda de aire de la red y a cómo funcione el sistema. No conviene instalar un aparato para la demanda actual, sino pensando en la producción futura. Así, no se quedarán escasas las tuberías e instalaciones si se aumenta la producción.
Velocidad de circulación.
Se situará entre los 6 y los 10 m/s para resultar efectiva. Al controlar que no aumente demasiado, se regulan las pérdidas de presión.
Redes.
Resulta importante decidir el tipo de configuración de la máquina antes de su instalación. Por ejemplo, escoger entre redes abiertas o cerradas (forma lineal o de anillo).
Trabajadores capacitados y formados.
Los trabajos técnicos deben realizarse conociendo el sector. Si se encarga una persona de la plantilla que no es especializada, puede ser contraproducente e incurrir en gastos innecesarios. Cumplir con el calendario de revisiones resulta responsable, eficiente y seguro.
Conclusiones.
El mantenimiento industrial debe respetar los tiempos marcados por los profesionales y mantener cuidadas todas las piezas de la máquina. Conociendo estos errores comunes, será más fácil evitarlos.
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